Carlos Ruf Osola @kalleruf 15/04/2017 Estamos en un mundo competitivo, en el que además de cumplir, debemos estar en la cresta de la ola
Carlos Ruf Osola
@kalleruf
15/04/2017
Estamos en un mundo competitivo, en el que además de cumplir, debemos estar en la cresta de la ola y en el que mostrar debilidad o sentimientos similares casi está proscrito, “ves a la tuya” te apuntan, viéndote abocado a crear o tener celos y envidias. a veces sin saber bien el porque, y ni se te ocurra pensar y creer que si alguien tiene o ha merecido algo que tú también te mereces eso y más , no vaya a ser.
Ganar a toda costa, por lo Civil o lo Penal, un mundo del TodoVale.
Pero, no quiero reflejar esa COMPETITIVIDAD SUICIDA o COMPETITIVAD DESTRUCTIVA si no la COMPETITIVIDAD POSITIVA, la que creo sería ideal en el deporte, en concreto en el baloncesto, según mi experiencia, y aplicable a la vida diaria.
Veréis que este concepto COMPETITIVIDAD es erróneamente interpretado como egoísmo, pero yo lo veo más como CAPACIDAD DE SUPERACIÓN,siendo una de las enseñanzas que el deporte me ha dado, que es el no mirarme en nadie, si no en mi mismo, ser mejor y mejorar esa es la clave de la evolución, lo vi tarde desgraciadamente, pero lo vi, y lo intento llevar a mi día a día.
Mejorar, cambiar, las famosas crisis y derrotas, son enseñanzas que nos van puliendo, enseñando y nos hacen salir reforzados y más fuertes.
Como jugador ya venimos con una base, falta mejorar físicamente como técnicamente,fijarse objetivos (importantísimo), y muy importante es el madurar, una cosa que no nos enseñaron y que es la clave.
¿Por que jugadores con menos nivel que otros, tienen y sacan mejor rendimiento?
Por su competitividad, no sólo a la hora de mejorar ellos como ya he explicado, si no a la hora de desear y querer ganar, no sólo meter sus puntos y hacer unas buenas estadísticas, si no queriendo ganar el partido.
La gente tremendamente COMPETITIVA no sólo juega si no arrastra al resto de compañeros a alcanzar el nivel.
Siempre pongo el ejemplo de la evolución de Michael Jordan en la NBA, donde pasó de ser un buen jugador, destacando su compulsiva capacidad de anotación y espectacularidad a ser una estrella y quizás el mejor no sólo baloncestista si no el mejor deportista de la Historia, arrastrando a todo un equipo a querer y saber ganar, a tener fuerza mental y a no rendirse nunca, por muy complicadas que estuviesen las cosas.
Michael Jordan, siete años para convertir todo su trabajo en el hábito de ganar
Ser COMPETITIVO no sólo es querer ser el mejor, es querer mejorar, no ser conformista, es ser realista, tener objetivos, ir a por ellos y no rendirse, pero sobre todo tener una generosidad tremenda con los compañeros sacrificando tu ego personal e individual por el común grupal, destacando ante todo la gran responsabilidad de empujar y subir el nivel tanto individual como colectivo de todos y cada uno de ellos.
Psicólogo Organizacional / Consultor Senior de RRHH especialista en Selección, Formación y Desarrollo de personal.
Inquieto, polivalente, curioso, me gusta aprender de todo y de tod@s, y con buena cara y una gran ilusión, actuando siempre desde la máxima responsabilidad y profesionalidad.
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