Roberto González Rico El Diván del Deportista @bertorrico Viendo jugar a australianos y croatas en sus últimas actuaciones olímpicas, el primero
Roberto González Rico
El Diván del Deportista
Viendo jugar a australianos y croatas en sus últimas actuaciones olímpicas, el primero con derrota ante los USA, y los segundos con victoria ante el equipo anfitrión uno no puede dar más que gracias, gracias y mil gracias, pues parecen haber abierto la puerta hacia una nueva etapa en este deporte, o al menos eso parece, que no es poco dados los tiempos actuales en los que estamos.
Parten como no del concepto de equipo, entendido éste como una falsa sinfonía anárquica, aunque controlada, donde se desarrolla al máximo el talento individual de cada uno de sus componentes en beneficio siempre del éxito colectivo.
Es el triunfo de un nuevo baloncesto, que va mucho más allá de un simple resultado, algo así como la vuelta al romaticismo de este deporte, y del que me enamoré como much@s de Vosotr@s allá a finales de los 80 y principios de los 90.
Lo equipararía, salvando las distancias y en términos baloncesto-futbolísticos a lo que podría ser el resultado del cruce si juntamos al Dream Team de Cruyff y a los Golden State Warriors de esta temporada (con excepción de las series finales contra los Cavs).
Johan Cruyff solo buscó una cosa en vida: divertir.
Es decir, estamos hablando de equipos modernos y rompedores, que suponen un cambio de modelo dentro de los paradigmas establecidos actuales, combinando conceptos si lo quieren más antiguos y emocionales ( pasiones, furias y similares), con otros si quieren más tangibles y actuales como son los conocimientos, las capacidades y habilidades, siendo en el caso de Johan y su Dream team, una revolución total, sobre todo en el componente táctico, en un deporte tan poco avanzado y desarrollado, como era hasta ese momento el mundo del fútbol.
De Croacia siempre hemos sabido que han tenido talento y mucho para esto del baloncesto, que su técnica es exquisita, su tiro depurado y aseado y que sus fundamentos darían para completar cientos de clínics y campus.
La fábrica yugoslava nos ha dado posiblemente los mayores talentos del baloncesto europeo, combinándolo con cierto carácter ganador y un gen competitivo que les ha hecho ser una de las principales referencisa del deporte en el viejo continente.
Un Dream team que una absurda guerra destrozó…
Y de ese talento la selección croata ha venido bien servida a estos JJOO, y ayer me lo confirmaron en el partido contra los anfitriones, que gozada para el espectador, una maravilla todo ese talento puesto al servicio de esta maravilloso deporte, basket moderno, o lo que Uds quieran, pero verlos capaces de jugar sin base durante muchos minutos, sabiendo ocupar los espacios con jugadores polivalentes e inteligentes, con una disposición táctica muy poco rígida, de intercambio constante de posiciones, sin perder la efectividad y eficacia y sin importar quién estuviese ocupando la misma, es algo a día de hoy al alcance de muy pocos equipos.
Es un nuevo modelo, ideado para combatir contra ese rancio, decadente y anticuado baloncesto made in Limoges, como las estructuras oxidadas de esta vieja Europa, que sea dicho de paso necesita más que una profunda reconstrucción.
Y todo ello a pesar de la ausencia de dos de los mejores pívots de la pasada ACB ( Tomic y Hamilton), las cuales han minimizado ya vaya de que manera con el killler Bogdanovic, vaya mano la suya y un Saric que apunta muy alto, y eso que aún estamos a la espera de que se presente a filas SuperMario Hezonja.
Tampoco quiero olvidar la gran labor en el banquillo de Aco Petrovic, el hermanísimo, de quien ya sabíamos de su etapa en Sevilla que era un excelente motivador y revolucionario en la táctica individual y de equipo en sus planteamientos de juego, y quien ha sabido por ahora aprovechar el buen trabajo anterior de Sasha Djordjevic y la aparición de los nuevos talentos.
Bogdanovic y su rifle de repetición…Rudy y Pau como testigos por parte de la acusación…
Por su parte los Australianos son el atrevimiento, el descaro, la alegría, el fiel reflejo de un país de sol, excelentes playas, mucho surf y música, que seguramente muchos habremos pensado en visitar y con la misma si se presentase la oportunidad poder quedarnos a vivir durante un par de años.
Es un país donde se vive bien, con muy buena y educada gente, de gran tradición deportiva y que no sé porque siempre me han causado muy buen rollo, y eso que soy más de pop y el surf como que no mucho….
Y ahí están los aussies, uno de los equipos que vienen a redimirse de su mal mundial en España 2014, quizás junto a los nuestros los gran fracasados, pero parece que han hecho muy bien los deberes, han tomado buena nota y han sabido conjuntar un buen equipo, donde combinan jugadores en plena madurez deportiva con algunos otros veteranos, con una gran experiencia, la gran mayoría en la NBA y con protagonismo, hecho que a mí entender es una de las claves de este éxito, que faltará por ver si transforman en medalla.
Los USA tuvieron que dejar a un lado las bañadores, chanclas y toallas por unas horas…
Hace dos noches pusieron en evidencia a los USA, marcando el camino para los otros, haciendo una verdadera exhibición de compromiso en su juego, y una gran solidaridad , que añadido a la calidad individual de sus jugadores por unos momentos nos hicieron creer que la misión de derrotar a los EEUU era más que posible, y quees no fue el sueño de una calurosa noche de verano.
Su modelo es bien diferente al croata, es menos artístico, más de sinfonía rock, menos preciosista si quieren, aunque para gustos colores, y es que uno no deja ser un nostálgico europeo, pero su propuesta es igual de válida y efectiva, y representa a día de hoy un gran rayo de luz y de esperanza en estos tiempos en el que asistimos a la decadencia de selecciones de vetustas tradiciones como la Española, Francesa o Argentina, por citar algunas.
Como dijo ayer nuestro amigo y compañero Carlos Ruf ( Kalle para los amigos, y conocidos), “otro baloncesto si es posible“…”SOLO” hay que intentarlo una y otra vez, y ya verán que como bien decían los Depeche Mode ” es cuestión de tiempo”…
Psicólogo Organizacional / Consultor Senior de RRHH especialista en Selección, Formación y Desarrollo de personal.
Inquieto, polivalente, curioso, me gusta aprender de todo y de tod@s, y con buena cara y una gran ilusión, actuando siempre desde la máxima responsabilidad y profesionalidad.
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