El diván del deportista. MARATÓN Por Manu Redonda. 08/11/2016 Este domingo tuvo lugar la carrera de las carreras, el maratón de Nueva York. Más d
El diván del deportista.
MARATÓN
Por Manu Redonda. 08/11/2016
Este domingo tuvo lugar la carrera de las carreras, el maratón de Nueva York. Más de 50.000 corredores llegados de toda la geografía mundial, incluida España por supuesto, se enfrentaron a los 42 km 195 m por las calles de una de las ciudades más impresionantes del mundo.
El origen del maratón, según la mitología griega se remonta al año 490 a.c., por aquel entonces el soldado griego, Filipides, habría muerto tras recorrer los 37 kms que separaban las ciudades de Maratón y Atenas, para anunciar la victoria sobre el ejército Persa. Realmente Filípides recorrió el camino entre Atenas y Esparta para pedir refuerzos, lo que serían realmente 213 kms, pero el mito se impuso a la realidad por la gran popularidad que tuvo.
Filípides corriendo a Atenas
La inmensa mayoría de los runners aficionados que en un momento de nuestras vidas optamos por este deporte, hemos pensado, o incluso soñado con correr un maratón, nos atrae la idea de pasarnos tres o más horas sufriendo para cruzar la meta como auténticos héroes. Por supuesto yo no voy a ser menos y espero que en el plazo de dos años pueda hacer mi primer maratón. Aunque muchos podáis pensar que con el tiempo que llevo corriendo ya debería haber hecho alguno, la realidad es que para lanzarse a correrlo hay que planificarlo bien y tener todo bien atado, no podemos tomarnos a la ligera una prueba tan exigente tanto a nivel físico como mental.
Otro aspecto muy importante es elegir la ciudad donde queremos hacer nuestra puesta de largo en esta distancia, aunque parezca algo insignificante y de poca trascendencia, es un aliciente más a nuestro reto de terminar un maratón y convertirnos en un finisher del maratón. Hoy en día hay cientos y cientos de maratones repartidos por todo el mundo, quizás el más popular y el que reúne más gente sea el de Nueva York, pero hay otros igual de apetecibles, Londres, Berlín, Barcelona, París, Roma, Boston y un largo etcétera de ciudades cada una con su encanto particular.
Si queréis saber cuál tengo entre ceja y ceja os lo diré, Nueva York es mi sueño y sería increíble poder correr allí entre más de cincuenta mil personas, cruzar el puente de Brooklyn y recorrer las calles que ya visité en mi luna de miel, pero el hecho de conocer esta ciudad y la distancia y lo complicado que sería organizar ese viaje, me he pasado a uno un poco más factible como sería el maratón de Londres, una ciudad que nunca he visitado y que tendría la excusa perfecta para disfrutar de un viaje de ensueño con la culminación de uno de mis grandes retos.
El 2018, es ese año que tengo marcado en rojo en mi calendario para lanzarme a esta aventura, en Londres se disputa en el mes de abril, por lo que este año que se avecina será crucial para coger bastante fondo que me permita centrarme desde finales del 2017 en una preparación más específica. La preparación del maratón no consta solo de hacer kilómetros y kilómetros, hay que hacer un trabajo mental muy exigente, pues tenemos que prepararnos para sufrir durante muchos momentos de la carrera.
Con un objetivo como el mío de hacerlo en 3’30”, sé que habrá muchos momentos donde las piernas vayan solas y la cabeza jugará un papel fundamental. Cuando hablamos de casi cuatro horas corriendo, tenemos que tener claro que habrá momentos donde nuestra cabeza nos mande parar, otros momentos donde nos veremos tan bien que querremos apretar más, y ahí es donde hay que tener la cabeza fría, será una carrera dura y donde solo el cruzar la meta para conseguir esa medalla tan preciada, hará que tanto esfuerzo y sacrificio hayan merecido la pena.
Psicólogo Organizacional / Consultor Senior de RRHH especialista en Selección, Formación y Desarrollo de personal.
Inquieto, polivalente, curioso, me gusta aprender de todo y de tod@s, y con buena cara y una gran ilusión, actuando siempre desde la máxima responsabilidad y profesionalidad.
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