Me sabe mal lo que está pasando en Sevilla con su equipo de Baloncesto, esta situación tristemente me ha hecho pensar en aquella situación vivida
Me sabe mal lo que está pasando en Sevilla con su equipo de Baloncesto, esta situación tristemente me ha hecho pensar en aquella situación vivida en su día con uno de los equipos de mi corazón, el Oar Ferrol y su triste desaparición a mediados de los años 90,
Más recientemente, otra situación que también me causo cierta tristeza fue la del cese de actividad el verano pasado de otro emblemático e histórico club como el Fórum de Valladolid.
Cito a estos dos clubes debido a que son los primeros que se me han venido a la cabeza, uno por cercanía y el otro debido a que es imposible no recordar a jugadores como Sabonis, Schlegel, Lavodrama o Trumbo, etc,..
Todas estas ciudades tienen en común que vivían para este deporte, cada dos semanas lo que en estas canchas se vivía era algo mágico, ya no solo el partido en sí, para mí, y lo digo como niño, adolescente y adulto joven que acudía a Malata, muchas veces era más importante el pre y el post partido que la disputa del encuentro.
Estar allí en medio de aquellos gigantes de gran corazón y poder ver de cerca a esos americanos a los que solo podías ver en las películas, los cuales no dejaban de ser personas como tú y yo(de carne y hueso) era todo un acontecimiento, de hecho, 30 años después me sigo emocionando y mucho cuando vuelvo la mirada a atrás y observo todo lo que me ha dado este deporte (conocimientos y experiencias, alegrías, amigos, etc..).
Recuerdo con especial nostalgia y una gran risa de oreja a oreja el estar allí en medio de tanto jugador intentando usar mi inglés, el básico que me habían enseñado en el colegio para intentar conseguir una muñequera o un simple autógrafo con dedicatoria especial incluida.
Era como una fiesta, una sana forma de divertirse , lo más de lo más, pensad que en aquella época no había móviles, internet, pokemones, o sálvame deleuxe, etc…por lo que muchos nos las ingeniábamos como podíamos para pasar las horas de cada día.
Pienso aquellos sábados por la tarde o domingos por la mañana como uno de los mejores momentos de mi vida, tanto si estaba en directo, mejor que mejor, como si me tiraba enfrente de la TV con mi cuaderno a apuntar las estadísticas que iban haciendo los jugadores,incluso tenía una especie de cesta que había hecho con una caja y una bolsa de naranjas, donde después repetía las mejores jugadas del duelo.
Esa historia, que no es única ni mucho menos, es la de muchos de mi generación, quienes hoy en día quieren ofrecérsela a sus hijos, puesto que el Baloncesto, no lo olviden que es una escuela de formación a través del deporte de élite, en la que se cultivan valores como el trabajo en equipo, compromiso, liderazgo, etc...competencias que posteriormente serán muy importantes en la vida adulta de la persona.
Sevilla no se merece esto, es una ciudad que vive mucho este tipo de acontecimientos, tiene a un equipo campeón de tres Uefas Europa League de las últimas 5 disputadas, ha sido en 1999 sede de los Mundiales de Atletismo, y aunque no he estado nunca allí me llega por la gente que es un lugar donde se respira y se vive mucho el deporte, no siendo el baloncesto una excepción, como bien se está viendo estos últimos tiempos con todo el apoyo que esté recibiendo desde todas las partes del mundo entero.
Se dice rápido y pronto, pero el Sevilla de Baloncesto ha contado con jugadores históricos como Brian Jackson, Darryl Middleton , Nacho Azofra, Turner, Lockhart, Vecina, Bingenheimer o el añorado Quino Salvo (DEP) , siendo incluso subcampeón de Copa y ACB en la temporada 1998-99 o los más recientes Aito García Reneses, Tomas Satoransky, Willy Hernangómez o Kripstaps Porzinguis.
Desde el Diván del Deportista como amantes que somos de es este deporte, espero y deseo que de esta vez se pueda hacer algo y se evite la desaparición de uno de nuestros clásicos de la ACB...¡Ánimo Sevilla!. YOU CAN…
Psicólogo Organizacional / Consultor Senior de RRHH especialista en Selección, Formación y Desarrollo de personal.
Inquieto, polivalente, curioso, me gusta aprender de todo y de tod@s, y con buena cara y una gran ilusión, actuando siempre desde la máxima responsabilidad y profesionalidad.
COMENTARIOS